Este es el título de la conferencia que impartiré el próximo día 19 de enero de 2010, a las 18h, en el salón Sorolla del Ateneo Mercantil de Valencia (plaza del Ayuntamiento, 18 Valencia), organizada por la Asociación Viktor Frankl.
Me encantaría poder saludar allí a algunos de los lectores valencianos de este blog.
La entrada es gratuita.
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Hola Merce.Me siento muy bien al poder hablar contigo, he leido tu libro y no me olvido ya nunca del nombre de tu hijo.Cada vez que hablo de tu libro digo, si la madre de Ignasi decia que...
ResponderEliminarParece que os conocemos un poquito y ya sois parte de nuestras vidas. Hace tres meses el dia 11 de Octubre murio mi sobrino Iñigo (mi niño como digo yo) en un accidente de trafico.Iba con sus padres y su prima.Todos han estado graves y hemos pasado un infierno hasta que pudimos contarselo a su madre tres semanas despues y pudimos despedirnos de el un mes despues de irse.
Estamos mal todos, somos una piña de familia, le echamos de menos cada vez mas a nuestro niño que cumplia 10 años el 28 de Noviembre.Iñigo es todo belleza por dentro y por fuera, energia, pasion por la vida,un pequeño hombrecito encantador del que siempre estare enamorada.Como podemos seguir sin el? Como puedo ayudar a mi hermana y a mi cuñado? estas son las preguntas que me hago cada dia.LEo muchos libros para poder transmitirles todo lo que yo pueda absorber de ellos. Yo siento muhas cosas que me dicen que esta bien, hay tantas señales, casualidades. Empiezo a creer en cosas nuevas para mi pero que no quiero rechazar solo por pensar que puede ser solo algo a lo que agarrarme,y si resulta que no estoy confundida?
Quiero darle una posibilidad a Iñigo de estar bien o de que no este tan mal, porque y si es asi, quien soy yo para negarselo?
He terminado ahora el libro La muerte un amanecer, me ha removido mucho y me ha dadao esperanza.Hay veces que pienso si me estare volviendo loca, pero solo quiero que aprendamos a vivir con Iñigo otra vez, de una manera diferente pero siempre juntos, poder ser felices con el otra vez para poder volver a ser felices todos algun dia.Me encantaria poder seguir hablando contigo y gracias por tu libro, un regalo.Virginia.
Maliminin
EliminarMe siento tan identificada con tus palabras, tus preguntas y tus sentimientos.
También perdí a mi nene (mi sobrino) en un accidente de tráfico, no hace un mes todavia y siento que todo se detuvo. No sé cómo se hace para seguir sin él, era nuestro centro, y estamos devastados. Él también es todo belleza, pura dulzura y todo amor. Todavía sigo escuchando su tierna voz diciendome "tía". También leo mucho para encontrar herramientas para ayudar a mi hermano y mis padres. Sólo pienso que era tan chico para irse y nosotros teniamos tanto todavía para darle que me siento que quedamos a mitad de camino. Gracias por compartir tus palabras me hicieron emocionar y sentir que no estoy tan sola. Gracias...
Hola bonito, claro que no estás sola. La energía y el amor de tu sobrino os acompañará siempre.
EliminarUn abrazo grande, grande
Hola Virginia,
ResponderEliminarUn duelo como el que vivís vosotros ofrece la posibilidad de descubrir perspectivas inimaginables. Esto es lo que te está sucediendo a ti. Desde luego, no estás loca. El camino que ahora os toca recorrer es largo, no desesperes. Deja la mente y guíate por el corazón.
Me alegra muchísimo que te refieras a mi como "la madre de Ignasi". Gracias.
Un abrazo muy fuerte,
Mercè
Hola de nuevo.Gracias por contestarme, significa mucho para nosotros porque muchas veces parece que no nos entiende nadie y es dificil hablar.
ResponderEliminarYo pienso seguir dejando que mi corazon me lleve por estos caminos nuevos para mi y espero que todos nos contagiemos un poco.Gracias de nuevo.
Un abrazo, Virginia.
Hola Mercé, iremos a escucharte mis padres y yo. Me gustaría tanto que ellos pudieran encontrar la misma serenidad que yo encuentro cuando te leo en el blog. Todavía no hace ni cuatro meses que murió mi hermano en un accidente de tráfico y nuestra vida está del revés, pero yo empiezo a entender y a creer en muchas cosas en las que antes no había ni pensado. No se si lo hago por necesidad personal o porque de verdad hay algo después de la muerte, no lo sé, Mercé, es todo tan difícil. La muerte de mi hermano y ver a mis padres hundidos me duele, me duele tanto. Pero intuyo, y no se porqué, que tu les puedes ayudar, que tus palabras les pueden servir, como me sirven a mi cada vez que te leo. Por eso estoy deseando ir el martes a verte y escucharte. Gracias por todo lo que haces por la gente, que, como tú, ha sufrido la pérdida de un ser querido. Gracias de corazón Mercé.
ResponderEliminarUn beso. Mayte.
Mayte, preciosa, me hará mucha ilusión daros un abrazo. Nos vemos el martes.
ResponderEliminarHola Mercé,
ResponderEliminarSoy una de las muchas madres que han asistido a tu conferencia en Valencia y quiero darte las
gracias por tus palabras y ánimos durante la misma.
Perdí a Carolina junto a su amiga Mar en un accidente de tráfico en Madrid causado por otra persona. Estuvimos su madre, Sari y yo
escuchandote y juntas hemos podido comprobar
que todas las madres sentimos el mismo dolor
Lo expresaste muy bien y sentimos tambien la perdida de tu hijo. Nosotros hemos creado un centro cultural con el nombre de Carolina para seguir haciendo lo que le hubiese gustado a ella, (audiovisual, teatro, musica..)
Para nosotras, hace siete años que ocurrió esta tragedia pero seguimos con la herida en el pecho y llorando, pero sabemos que su recuerdo perdurará en nuestro corazón hasta el final de nuestras vidas.
Te doy la web de nuestro centro y espero que sigamos en contacto en el futuro.
Un abrazo muy fuerte.
www.carolinatorres.org
Hola madre de Carolina,
ResponderEliminarMe ha encantado visitar la web de vuestro centro cultural. Es un trabajo impresionante, que seguro facilita la creatividad a muchísimas personas.
Las semillas que plantaron Carolina y Mar han fructificado. Nuestros hijos vienen a hacer un trabajo corto, pero intenso.
Un beso para ti y la madre de Mar,
Mercè
hola mi nombre es adriana,yo tambien he perdido a mi hija ana maria se ha ido el 9 de septiembre de 2009.la echo mucho de menos,quisiera formar parte de vuestro grupo.quiero volver a vivir.gracias
ResponderEliminarBienvenida Adriana,
ResponderEliminarEl duelo es largo, y ten paciencia, pero te aseguro que si trabajas contigo misma y te permites sentir el dolor y la alegría, volveras a renacer y sentirás a tu hija siempre en tu corazón. Deshazte de la rabia primero y llena tu corazón de amor.
Un abrazo grande, grande y muy cariñoso,
Mercè
hola merce.gracias por responder.ella era todo para mi,todo.tengo tanto dolor y como tu bien sabes rabia,a veces parece que fuera malo amar,cuando amas tanto y te arrebatan ese amor ,sientes que ya nada tiene valor.porque hemos sido escogidas para este dolor?.a caso hemos de sentirnos afortunadas o a caso desgraciadas.ana llego a mi vida con 30 años,cuando menos lo esperaba y siendo fruto del amor,desde ese instante empezo a ser todo para mi.ahora con sus 8 añitos me ha dejado.ella en sus diarios y notas infantiles ha escrito como uno de sus deseos "QUIERO LA LUNA Y VOLAR"ante la pregunta de un genio de la lampara.quiero pensar que sus deseos sean echo realidad desde la inocencia de sus respuestas.ana ayudame a vivir sin ti.siento rabia por no tenerla a mi lado. talvez el tiempo me ayude a "conformarme" como dice la abuela.talvez. un abrazo fuerte.para quien comprende mi dolor gracias.
ResponderEliminarAdriana, tanto tú como yo hemos sido afortunadas porque hemos tenido en casa a dos ángeles y, ahora, aunque no los podamos ver, también los tenemos cerca. Ana te ayudará a vivir en paz y con amor hasta tu último suspiro. Tu felicidad es también la de ella. No lo olvides. Los seres que se aman verdaderamente, quieren lo mejor el uno para el otro. Tú déjala volar a su aire y habla con ella siempre que lo necesites. Ahora el dolor es muy profundo y tendrás altibajos durante mucho tiempo, años. Poco a poco es posible ir sintiendo más amor que rabia. Tu felicidad es el mejor regalo para tu hija, porque significa que el amor que dio -y da- ha florecido.
ResponderEliminarUn abrazo,
Mercè