Después de noches de emociones y bullicio, como la de San Juan o la de Fin de Año, la ciudad despierta somnolienta, con hambre de silencio. Yo no he salido a la calle en todo el día; por la mañana, sin prisas, he estado poniendo orden en casa para serenar mi alma. Por la tarde, tumbada en el sofá, he estado ojeando el libro “Las palabras que curan”, de Alex Rovira, en el que ha reunido un compendio de frases, de pensamientos de personas sabias. Todas encierran reflexiones lúcidas, son como velitas.
Destaco aquí dos de Teresa de Calcuta:
- “En el momento de la muerte, no se nos juzgará por la cantidad de trabajo que hayamos hecho, sino por el peso de amor que hayamos puesto en nuestro trabajo”.
-“Si juzgas a la gente, no tienes tiempo de amarla”.
¡Cuánta fuerza malgastamos en juzgar a los demás y no digamos la que desaprovechamos juzgándonos a nosotros mismos. Y cuanto tiempo perdemos en hacer mil y una cosa sin cariño! Hacer por hacer, sin amor, no nos lleva a ningún lado.
También me ha llegado al corazón esta reflexión de Hermann Hesse:
“Yo me siento con frecuencia cansado y sin fe ni valor, pero creo que estos estados no deben combatirse propiamente, sino que es preciso abandonarse a ellos, llorar alguna vez, o ensimismarse sin pensar en nada, y luego se advierte que entretanto el alma ha seguido viviendo… y ha avanzado”.
¡Qué poco nos permitimos sentir algunas personas lo que sentimos! ¡Que bueno es quedarse sin hacer nada, escuchándonos sin reproches!
¡Cuántas veces nos pide el alma que nos quedemos quietos y en silencio para poder prestar atención a la tristeza en vez de ahogarla!
Hola Mercè,
ResponderEliminarQue frases tan estupendas, cuanto dicen y cuanto hacen sentir, la verdad es que al final una tiene que creer en la causalidad en lugar de en la casualidad.
Esta semana he dejado de trabajar por las tardes, yo trabajo de lunes a viernes por la mañana y por la tarde, y a pesar de ser verano tenía la posibilidad de seguir trabajando mañana y tarde los cinco días de la semana pero he tenido que decir que no, porque desde que mi hermano murió (mañana hace 8 meses), sólo he faltado al trabajo 5 días, estoy incluyendo el día que pasamos en el tanatorio y el día del entierro, y mi cuerpo me ha dado dos avisos, el último la semana pasada, así que he decidido como dice una de las frases "quedarme quieta para en silencio poder prestar atención a la tristeza en vez de ahogarla", a mí me encanta mi trabajo, tengo un ambiente en el trabajo envidiable, mis compañeros son más que compañeros y me sirve de terapia, pero en la medida justa porque mi energía no es la misma que antes del accidente de mi hermano.
El ambiente en mi casa es de tristeza, mis padres están destrozados y yo quiero pasar más tiempo con ellos, por mi hermano, por ellos y por mí. Estoy orgullosísima de mis padres porque los veo trabajar el duelo pero es tan duro.........que a veces uno tiene ganas de tirar la toalla.
Ahora quiero permitirme sentir los sentimientos que me invaden en esta etapa de mi duelo, y compartir con mis padres los sentimientos que les invaden a ellos, quiero poder darles todo el amor que siento por ellos y hacerles llegar en la medida de lo posible el amor que mi hermano seguro les está mandando desde donde esté, porque yo adoro a mi hermano y a mis padres, pero mi hermano los adoraba y me adoraba a mí en la misma medida.
Gracias Mercê, por haberme generado la necesidad de escribir de inmediato al haber leido esas frases que desconocía.
Un beso muy cariñoso para ti y todos los seguidores de tu blog
Hola Ana, Bonita, ¡que ilusión tener noticias tuyas1 Me alegro mucho que hayas decidido tener más tiempo para sentir. Eso seguro que aligerará tu duelo. Recuerdo que yo, cuando ya había vuelto a trabajar después del accidente, me pedí dos meses de permiso para poder estar conmigo misma y con los míos, compartiendo amor con Ignasi en silencio.
ResponderEliminar¡Qué bien que tus padres estén trabajando el duelo y qué suerte tienen de tenerte como hija!
Un beso grande para los tres
Hola mercé, hace tres meses mi hija de 39años se suicidó,lo que he leído tuyo me ha ayudado mucho, y quiso seguir por el camino que has ido tu, me gustaría que me escribieras unas lineas para darme animo
ResponderEliminarUn saludo Lola
Hola Lola,
ResponderEliminarLa fuerza para salir de esto la tienes tú, aunque a menudo te pueda parecer que no. Pide ayuda cuando desfallezcas y surgirán las personas adecuadas. Cuando he abierto mi corazón, lo que yo denomio mis guías siempre me han ayudado. Eso sí, "a Dios rogando y con el mazo dando". Quiero decir que tienes que emprender un trabajo personal, interior, intenso. Ten paciencia y confianza. No te obsesiones con los "porqués"; pon la atención en cómo salir del dolor, sin ignorarlo.Ten paciencia y, sobre todo, estate atenta a lo que puedas aprender de lo que te está suciendo. No podemos cambiar el pasado, pero sí tenemos capacidad de influir en el presente. Al acostarte, no cierres los ojos antes de recordar algo agradable que te haya sucedido, aunque sea mínima. A mi me fue bien hacer grande la sensación de gratitud por lo que, en principio, solo son pequeñas cosas.Agárrate, Lola, al amor y no te sueltes.
Un abrazo muy cariñoso
Soy la tia de Carlos,hoy hace 14 meses que no le vemos,tengo la sensación que se está mitigando un poco el dolor aunque a veces me den ramalazos.Siempre he oido que los que se van de esta manera tienen mucho poder y creezme lo he comprobado,¿como se puede seguir teniendo energía?ellos están ahí.Abrazos.
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